A esa hora se pararon los relojes en Madrid
Una fría mañana de marzo.
Era un día gris.
Todo era silencio excepto por el lejano rumor de las ambulancias.
Ese día todos salieron a la calle a buscar a sus seres queridos para abrazarlos.
Estaba a punto de empezar la primavera pero se partió
por la mitad y Madrid siguió siendo lo mismo pero nunca volvió a ser igual.
En Recuerdo a las víctimas, a todos aquellos que nos faltan,
algunos de ellos amigos nuestros.
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